Es mucho más fácil no saber las cosas, a veces. Todo cambia, los amigos se van. Y la vida no se detiene para nadie, me entran ganas de reír o tal vez de llorar, o tal vez de encogerme de hombros y pensar en cómo todo el mundo es extraño, sobre todo yo.
Creo que cada persona
tiene que vivir su propia vida y
que puede tomar la decisión de compartirla
con otras personas, o no.
No podemos simplemente sentarnos y poner la vida de todo el mundo por delante de la nuestra, nuestra vida propia, nosotros mismos y creo que esto es como en el amor, no se puede.
Hay que hacer las cosas.
Voy a hacer lo que quiero hacer. Voy a ser quien realmente soy.
Y todos podrán sentarse alrededor de mi, si quieren,y preguntarse y sientirse mal, enfadarse uno con el otro y culpar a un montón de gente por lo que hicieron o dejaron de hacer o lo que no sabían. No sé. Supongo que siempre puede haber alguien a quien culpar. Por ser simplemente diferente .
Tal vez sea bueno ver las cosas con perspectiva, pero a veces, creo que la única perspectiva es la que realmente existe. Está bien para sentir las cosas. Yo soy como realmente soy.
Y eso es suficiente para hacerme sentir el infinito, infinita.